La gran perseverancia de Mario Mandzukic



La carrera de Mario Mandzukic inició en las filas del modesto Ditzingen de Alemania cuando tan solo era un niño, allí duró un corto periodo de tiempo hasta que regresó a su país para vestir los colores del Marsonia de Croacia, un club muy, pero muy chico que basa su filosofía en producir talentos para que luego promoverlos al primer equipo. En este club, Mario estuvo durante cinco años en los que fue destacando para luego fichar por el Zeljeznicar Slavonski Brod de la tercera división de Croacia... allí duró solo un año y regresó al Marsonia donde debutó finalmente como profesional en la Segunda División de su país natal... a partir de este momento nada sería como antes pues anotó 14 goles en 23 partidos y se marcharía al año siguiente al NK Zagreb donde debutaría en la división de oro del fútbol croata.
En este punto de su carrera, Mario comenzó a ser etiquetado como uno de los jóvenes croatas más prometedores de su generación, sin embargo esta etiqueta comenzó a pesarle pues en su primer año en el NK Zagreb solo anotaría 3 goles en 28 compromisos, por lo que después comenzaría a ser catalogado como un joven promesa que jamás alcanzaría su potencial.
La temporada siguiente anotaría 11 goles en 23 compromisos y atrajo la atención del club más grande del país: Dinamo Zagreb quien terminó fichándolo por 1.3 millones de euros... y es allí junto a un joven Luka Modric cuando su carrera empieza a ir en línea ascendente pues consiguió grandes registros goleadores, títulos de goleo y títulos con el club, haciendo méritos suficientes para debutar con Croacia y marcharse al Wolfsburgo por 7 millones de euros.
En el Wolfsburgo la rompió durante los años que estuvo allí, tanto así que fue fichado por el FC Bayern donde tuvo buenos registros pese a que perdió poco a poco su protagonismo en el club. De allí se marcharía al Atlético de Madrid y más tarde recalaría en la Juventus donde se ha consolidado como uno de los mejores delanteros croatas de la historia.


Comentarios

Entradas populares de este blog

La gran enseñanza de la película “Goal”

La gran Victoria de Robben